Los Nocheros y Jorge Rojas, amigos son los amigos: una celebración musical más allá del tiempo

El grupo salteño y el músico afincado en Anisacate se reencontraron a casi 20 años de haber separado sus caminos. Por lo visto en el escenario de La Yapa, era una cuenta pendiente desde lo emotivo y también desde lo musical.

Las cuatro voces nocheras hicieron vibrar a una pequeña multitud de fans. (Prensa La Yapa).

Una década atrás, si alguien le hubiera dicho a Jorge Rojas que volvería a reunirse con Los Nocheros casi 20 años después de su alejamiento, y en su propia casa, el cantor seguramente habría hecho caso omiso a ese presagio y hubiera soltado algo parecido a una risa irónica.
“Gracias por acompañarnos y que todo esto sea posible”, destacó Jorge Rojas. “Vamos a recorrer en canciones la historia misma de cada uno de los que van a pasar por este lugar, desde el principio, desde aquellas primeras canciones con los changos hasta la última que vamos a cantar hoy”, definió luego. “Forman parte de un mismo árbol”, agregó antes de agradecerle a la vida por haber formado parte de Los Nocheros.
Mario Teruel y Jorge Rojas intercambiaron anécdotas y mostraron su alegría por las noches compartidas. (Prensa La Yapa).
Nuevamente, Rojas sacó a relucir su repertorio personal y mostró por qué es uno de los compositores más respetados de su generación. Junto a su banda, tocó poco más de una hora antes de volver a dirigirse al público para anticipar la llegada de su antiguo grupo. Allí el músico volvió a hacer referencia a lo especial de este encuentro y recordó con una anécdota su llegada al cuarteto salteño durante la primera mitad de los ‘90.
Rojas contó que Mario Teruel lo mandó a llamar a Marca Borrada, donde había arribado para visitar a su familia. El cantante recordó que en ese momento era una zona de difícil acceso y la convocatoria llegó de manera indirecta y disfrazada de problema en ciernes: a través de la Gendarmería y de la policía. A sólo un día de haber vuelto a su pago, Rojas emprendió el viaje a Salta para presentarse en una comisaría y allí descubrió que en realidad era Teruel el que lo había convocado de esa manera tan particular.
Finalmente, con No saber de ti, el encuentro se concretó una vez más y durante una hora y algunos minutos más cerca de 4 mil personas fueron felices y cantaron a los gritos. De eso se trataba, en definitiva, y eso es lo que entendieron tanto Rojas como sus antiguos compañeros. Me enamoré de una zambaCosa peligrosaRoja boca, la ovacionada Entre la tierra y el cielo (con Rojas y Rubén Ehizaguirre erizando la piel a dúo), Las morasEn suspenso y Canción del adiós fueron algunas de las canciones compartidas antes del cierre definitivo con La Cerrillana.
Para ese momento, pasadas las 2 de la madrugada, ya había quedado claro que este reencuentro no sólo era muy esperado abajo del escenario. Arriba, los protagonistas también derrochaban sonrisas y emoción. Evidentemente era hora de saldar esa deuda de largo aliento. Una cuenta pendiente con una amistad musical capaz de vencer cualquier contratiempo.
Los Nocheros y Jorge Rojas, reunidos en La Yapa, un predio a la altura de las circunstancias. (Prensa La Yapa).
Nota publicada en el Diario La Voz de Córdoba

Autor entrada: Osvaldo La Bruna