This Day in History: 2019-06-03
3 de Junio de 1770 – Nace Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, en Ciudad de Buenos Aires, que por ese entonces pertenecía al Virreynato del Perú. Intelectual, economista, periodista, político, abogado y militar.
Comenzó estudiando en el Real Colegio de San Carlos (actual Colegio Nacional de Buenos Aires) y entre 1786 y 1793 estudio Derecho en las Universidades españolas de Salamanca y Valladolid.
En 1794 regresó a Buenos Aires como Secretario del Consulado de Comercio.
En 1806 se produce la Primer Invasión inglesa. Tras tomar la ciudad los ingleses exigieron a todas las autoridades que prestaran juramento de lealtad. El Consulado en pleno accedió a la demanda inglesa, exceptuando a Belgrano que sostuvo que «Queremos al antiguo amo, o a ninguno». Se exilió de Buenos Aires y buscó refugio en la capilla de Mercedes, en la Banda Oriental. Luego los ingleses fueron expulsados de Buenos Aires por la expedición organizada por Santiago de Liniers. Belgrano regresó tras la reconquista y se unió a las fuerzas que organizaba Liniers. Fue nombrado sargento mayor del Regimiento de Patricios, bajo las órdenes de Cornelio Saavedra, y profundizó sus estudios de táctica militar. Tras conflictos con otros oficiales Belgrano renunció al cargo de Sargento Mayor y se puso a las órdenes de Liniers.
En 1807 se produce la Segunda Invasión inglesa. Tras la exitosa resistencia de Buenos Aires volvió a hacerse cargo del Consulado y dejó nuevamente los estudios militares.
En 1810 renunció a su cargo en el Consulado y fue uno de los principales dirigentes de la insurrección que se transformó en la Revolución de Mayo. Participó del Cabildo Abierto del 22 de Mayo, y votó por el reemplazo del Virrey por una Junta, que fue la propuesta vencedora. Nombrado Vocal de la Primera Junta. Ese mismo año fue nombrado General a cargo del Ejército libertador del Paraguay, pues Buenos Aires buscaba que todas las ciudades americanas se unieran a la Revolución contra España. En esa expedición al Paraguay, el 19 de Diciembre logra una victoria en la batalla de Campichuelo.
En 1811 cae derrotado en Paraguay y Tacuarí, esto significó un revés para las intenciones de Buenos Aires, pero influyó para la emancipación del Paraguay de España.
Fue enviado a Rosario, a vigilar las costas del Río Paraná contra los avances realistas desde Montevideo. Allí el día 27 de Febrero de 1812, enarboló por primera vez la Bandera Argentina, con los colores de la escarapela, que en cierta forma también había sido obra suya, Blanco y azul-celeste. Ese mismo año y el mismo día que hizo flamear la bandera, fue nombrado Jefe del Ejército del Norte.
Cuando el ejército realista de Goyeneche inició su avance hacia el sur, Belgrano recibe la orden del Triunvirato de replegarse hacia Córdoba, así fue que dirigió el «Éxodo Jujeño» en Agosto de 1912, pero no pudo hacer cumplir esa orden para la Ciudad de Salta, dada la cercanía del enemigo. Belgrano considero que replegarse a Córdoba no era una decisión acertada y cumpliendo las órdenes decide dirigirse a Santiago del Estero. Pero es alcanzado en Las piedras por los realistas y pierde algunos hombres. En tanto Bernabé Aráoz y otros Ciudadanos Tucumanos lo convences de Dirigirse a San Miguel de Tucumán, allí Belgrano decide resistir y el 24 de Septiembre de 1812 ataca y triunfa sobre los realistas en la Batalla de Tucumán.
En 1813 Belgrano reorganiza sus tropas y avanza hacia Salta, logrando otra aplastante victoria sobre los realistas en la Batalla de Salta, el día 20 de Febrero, pero ese mismo año sufre las derrotas de Vilcapugio (1 de Octubre) y Ayohuma (14 de Noviembre). En 1814 Belgrano es relevado de su cargo de jefe del Ejército del Norte y en su reemplazo es nombrado el General José de San Martín. Regresa a Buenos Aires seriamente enfermo por afecciones contraídas durante sus extensas campañas militares, probablemente paludismo y mal de Chagas.
Entre 1814 y 1815 viajó a Europa, con riesgo para su vida, tanto por estar enfermo como por ser considerado un súbdito rebelde, para negociar el reconocimiento de la independencia ante las potencias del Viejo Mundo, aunque sin obtener resultados.
En 1816 nuevamente recibe el mando del Ejército del Norte, Pero no puede organizar una cuarta expedición al Alto Perú como el pretendía y enviando a Lamadrid en una campaña menor, este logra una victoria y una derrota antes de volver a Tucumán.
En 1817 por orden del Congreso de Tucumán, Belgrano envió a sus mejores tropas a aplastar la revolución federal de Santiago del Estero, acaudillada por Juan Francisco Borges, quien fue capturado por Aráoz de La Madrid. Al saber de la prisión de Borges, Belgrano, que originalmente había ordenado su fusilamiento, le indultó; pero Lamadrid ya había fusilado a su rival santiagueño.
En 1919 cuando estaba ya muy enfermo, el general Rondeau, nuevo Director Supremo, ordenó que el Ejército del Norte y el de Los Andes abandonaran la lucha contra los realistas para aplastar las rebeldías provinciales. San Martín sencillamente ignoró la orden, mientras Belgrano obedecía a medias: ordenó a sus tropas iniciar la marcha hacia el sur, pero pidió licencia por enfermedad y delegó el mando en su segundo, Francisco Fernández de La Cruz.
Se instaló en Tucumán, pero a poco de llegar fue sorprendido por un motín en esa provincia, que llevó al gobierno a su viejo conocido Bernabé Aráoz, y terminó con el general en prisión. Su médico particular, el escocés Joseph Redhead, a quien había conocido después de la batalla de Tucumán y que lo había acompañado desde entonces – tuvo que interceder por él para que no fuera encadenado. Fue también él quien preparó su viaje a Buenos Aires.
En 1820 llega a Buenos Aires, seriamente enfermos de hidropesía (acumulación de líquido en los tejidos que acompaña a diversas enfermedades del corazón, riñones y aparato digestivo) lo que lo llevo a la muerte.
3 de Junio de 1873 – Fallece el Cacique Juan Calfucurá (calfú o calvú=Azul y cura=piedra, traducido como Piedra Azul) en su propio toldo en Chilihué, cerca de General Acha en Provincia de La Pampa; en su más encumbrado momento, había llegado a comandar tres mil entrenados guerreros y había sido el jefe de veinte mil indios. Al menos, ocho de sus hijos prestaron servicios como oficiales suyos; uno de ellos, Manuel Namuncurá, ahijado de Justo José de Urquiza, se convirtió en el nuevo y último líder indígena.
Calfucurá emigró de Chile hacia Argentina para establecer la dinastía de la Piedra.
Dirigió una casi independiente república conocida como la Confederación de Salinas Grandes, ubicadas al Sur de la Provincia de La Pampa, abarcando los departamentos de Atrucó (localidad cabecera: Macachín), Guatraché (localidad cabecera: Guatraché), Hucal (localidad cabecera: Bernasconi) y Caleu-Caleu (localidad cabecera: La Adela).
Fue responsable, de casi todos los malones que hostigaron la provincia de Buenos Aires aproximadamente a mediados del siglo XIX; en 1837.
Atacó a los aucas chilenos y capturó cien mil cabezas de ganado.
Invadió Rojas en 1844 y Chivilcoy en 1846.
Por un tiempo, Rosas compró la paz mediante un trato y un pago, pero en 1847 Calfucurá se volvió contra él y atacó Bahía Blanca y otras ciudades fronterizas.
Se unió a Urquiza en su lucha contra Rosas y llegó a tener una relación personal con el primero. Durante el período en el cual Buenos Aires se separó de las demás provincias, Calfucurá mantuvo a la primera en un constante alboroto, su peor ataque fue el realizado contra Azul en 1855, de modo que las fuerzas debieron ser desviadas en su dirección.
Luego de derrotar a Mitre en Sierra Chica, fue vencido por los generales Granada, Conesa y Paunero en 1857, y nuevamente en Pigüé en el siguiente año.
Luchó del lado de la Confederación en la batalla de Cepeda (1859) y continuó incursionando en las ciudades de la Provincia de Buenos Aires hasta que fue derrotado en la batalla de Pichi Carhué, el 8 de Marzo de 1872, que provocó la muerte de doscientos indios. Fallecía al siguiente año tal como lo indica esta efeméride.
Una leyenda cuenta que cuando Calfucurá era niño recibió una pequeña piedra «cherufe» (meteorito) de color azul de manos de un «huecuvú» (espíritu maligno), convirtiéndolo en invencible.
Nota de Saul Lopez: la foto de Juan Calfucurá es meramente ilustrativa, ya que no existen datos ni fotografía (en ese tiempo solo pintaban cuadros) de su aspecto físico.
3 de Junio de 1937 – Nace José “Pepe” Berrios, en Antofagasta, República de Chile.
Cantor, bombisto, autor y compositor, radicado en Salta desde su infancia.
Integrante fundador de «Los de Salta» en 1958, junto a Luis Gualter Menú, Miguel Arnaldo Ramos y Mariano Antonio Vaca.
Formó parte de conjuntos, como «Las voces del Huayra», también grabó como solista, y en dúo con su hermano Francisco «Pancho» Berríos, formó parte del grupo «Las Voces», «Tumparenda» y «Los cantores de Salta».
Mientras integraba «Los Fronterizos» fue convocado para integrar el Trío Los Panchos.
Obras: Carnaval alegre (con Pancho Berrios y José Di Giulio) – Ceremonia de amor (con Daniel Altamirano) – Chaya salteña (con Pancho Berrios y José Di Giulio) – En el recuerdo (con Pancho Berrios y José Di Giulio) – La sagrada canción (con Gualter Menú y Mariano Vaca) – Lagrimas de otoño (con Luis Gualter Menú) – Muchacha (con Pancho Berrios y José Di Giulio) – Sufriré cuando te vayas (con Pancho Berrios y Tomas Calliero) – Viva Chile (con José Argentino Di Giulio), entre otras.
3 de Junio de 1953 – Nace Ángela Irene, seudónimo artístico de Ángela Irene Gola, en la Ciudad de General Pico, Provincia de La Pampa.
Comienza su carrera profesional en su ciudad natal, identificándose desde sus comienzos con el folklore.
Llega a Buenos Aires en 1975, animada y estimulada por el madrinazgo artístico de Mercedes Sosa.
En 1977 gana el Festival Nacional de la Canción de Cosquín, con el tema “Cruz de Quebracho”.
En 1979 conoce y graba con quién sería, uno de sus maestros y grandes amigos: Ariel Ramírez. De esa relación musical surge su primer larga duración: “Ariel Ramírez presenta a Ángela Irene”.
En 1982 lanza al mercado su segundo trabajo discográfico “La Cantora de Yala” grabado con el acompañamiento de los mejores músicos de nuestro país. Este disco obtiene gran repercusión, convirtiéndose en material predilecto para los difusores. En ese tiempo integra junto a Eduardo Lagos y Domingo Cura un espectáculo denominado “Así nos gusta”.
En 1990 junto a Marián Farías Gómez, reedita “Mujeres Argentinas”.
En 1993 aparece “Ángela Irene”, su tercer trabajo, éste en formato compacto, siempre con el acompañamiento de músicos de renombre, y un excelente repertorio. El mismo abarca una amplia gama de autores y ritmos, como la chacarera “Cachilo dormido” de Yupanqui, el chamamé “Santafecino de veras” de Ramírez, las bellísimas zambas “Volveré siempre a San Juan” y “La Tristecita” de Ariel Ramírez, milongas, huaynos y tonadas, por citar algunos. Grabó con Pedro Aznar, y lo acompañó en sus presentaciones en el Teatro Ateneo, las que fueron grabadas para su emisión hacia toda Latinoamérica por canal â, dando muestras una vez más de la versatilidad y las cualidades vocales e interpretativas que la han hecho, a lo largo de toda su carrera, la preferida del público y de la crítica.
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||